Si diseñan, habrán notado (o les habrá pasado) que una tipografía puede llevar el diseño al mejor punto o arruinarlo en segundos. Hay que saber elegir la tipografía que va a utilizarse, dentro del estilo del resto del proyecto y aplicarla al mismo tiempo de la forma adecuada.
Pero para todo esto tenemos que tener de donde elegirla. Para eso es bueno recorrer recopilaciones como la publicada en InstantShift, con treinta geniales fuentes gratuitas para utilizar en nuestros proyectos.
Hay de todo tipo y estilo, lo ideal sería que seleccionemos alguna de cada uno para estar bien cubiertos.